Científicos de ambas nacionalidades afirman que una apertura es esencial para la investigación en ciencias básicas y la clave para ello es compartir a todos los niveles.
Diez ciudades serían seleccionadas para la primera fase, con medidas para incluir una mejor clasificación de los residuos sólidos y mejoras en la planificación urbana.
El mes pasado el gobierno indio aprobó un proyecto de US$1.430 millones de dólares llamado Gaganyaan, bajo el cual astronautas serán enviados al espacio por al menos una semana.
Mientras los países desarrollados están buscando destinos alternativos al plástico, las empresas de reciclaje chinas se lanzaron a Malasia en busca de nuevas oportunidades.
Instituto capacitará también en otras áreas de gran crecimiento como los datos masivos (Big data), el aprendizaje automático y el diseño de aplicaciones móviles.
proyecto, que se encuadra dentro del marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, se convertirá en un modelo de trabajo mancomunado en la prevención de desastres y proteger vidas.
La ciudad identificó 10 situaciones cotidianas para las que espera que empresas de IA de todo el mundo aporten soluciones, en educación, salud, transporte y manufacturas.
Evento conjunto tiene como principal objetivo compartir los últimos avances en tecnología y gestión del agua, con el objetivo de alcanzar la sostenibilidad de los recursos hídricos.
"Se ha abierto la caja de Pandora. Aún podríamos tener un atisbo de esperanza para cerrarla antes de que sea demasiado tarde", dijeron 120 científicos en una carta publicada en medios.
Un dron de vigilancia, una plataforma de monitoreo y diagnóstico para procesos de fabricación y un esterilizador portátil capaz de eliminar bacterias en el agua estuvieron entre los destacados.
"No nos diga que tenemos un problema, sabemos que hay un problema, ¿cómo podemos resolverlo y qué se necesitará para hacerlo?" dijeron los gobiernos a la ONU.
La quinta Conferencia Our Ocean quiere concientizar sobre las amenazas de pesca ilegal, desechos marinos y cambio climático que enfrentan los océanos del mundo.
Ibuki-2, también conocido como GOSAT-2, medirá dióxido de carbono y otros gases de calentamiento global con mayor precisión que su antecesor, lanzado en 2009.
En 25 hectáreas y a un costo de US$ 648 millones, tiene una instalación de bioinformática, un centro de incubación y un centro de investigación de medicina traslacional.
Científicos de ambas nacionalidades afirman que una apertura es esencial para la investigación en ciencias básicas y la clave para ello es compartir a todos los niveles.