El declive de ambos índices vuelve a resaltar las dificultades de las autoridades chinas para estabilizar a los mercados en medio de una campaña de desapalancamiento.
Las ganancias de las empresas industriales chinas subieron a su ritmo más lento en siete meses en noviembre, mientras que en Tokio un alza de los precios del crudo impulsó a los títulos vinculados al petróleo.
Las acciones de Shanghái registraron este lunes su mayor caída diaria en 11 semanas, debido a las expectativas de una nueva ola de Ofertas Públicas Iniciales (OPIs).
El CSI300 anotó una ganancia semanal de un 2,1% y las acciones de Shanghái avanzaron un 1,9% en la semana, su mejor desempeño semanal en más de cuatro meses.